A las 4:45 suena el despertador (maldito cacharro). Oscar, continuando con su Transbrotoniana, ha de coger un autobús a las 5:45 de la mañana ( que horarios más extremos, se nota que los de aquí son de montaña) para encontrar alguna combinación que le lleve a Benasque.
En esta ocasión hemos de separarnos 2 días, ya que esta etapa finaliza en el refugio de Biados a los pies del Posets y hasta allí no hay combinaciones de transporte público. Eso quiere decir... ¡hoy me toca un vivac en solitario en medio de piris!, ardo en deseos.
A las 5:45 Oscar coge el autobús y yo me encamino , todavía de noche y con el frontal, a Parzán que es donde realmente comienza la etapa, allí y tras unos 2 km por carretera comienza una subida por pista que me dejará en el collado de Ordiceto y en un par de horitas, esta vez por senda, llego al refugio de Biados.
En el refugio de Biados , una buena ducha y una cena expendida me dejará con fuerzas para andar unos kilómetros más y para buscar un sitio tranquilo y bonito para viaquear. Al final pongo el huevo sobre las 22:30, no se si es bonito, porque ya está oscuro, pero tranquilo es. A tientas monto la esterilla en medio de una pradera inclinada y herbosa a la que tengo que darle un afeitado a navaja antes de poder acostarme. Una noche estupenda!.
Octava etapa: Biados - Benasque
Esta es mi última etapa (lagrimilla). Me levanto sobre las 7:00, me preparo un te cargadito sin azucar (se me acabó ayer) , lo combino con una barrita energética, degustando ambos con un placer que ya quisiera Arzak ver en sus clientes cuando prueban sus creaciones y me dispongo para la marcha.
Hoy se trata de subir 800m de desnivel y luego una bajada pasando por el refugio de estos que me dejará en el camping de Benasque donde he quedado con Oscar.
Este es el principio del valle de Estos desde el último collado
Chivo barbilampiño entre los roquedos!
La subida al collado se me hace más corta de lo que pensaba y sobre las 10:00 de la mañana ya he superado todo el desnivel positivo del viaje, ahora solo queda bajar!.
Llego al camping de la ixella y encuentro a Oscar en la terraza, se sorprende de verme tan pronto, ¡el olor a cerveza me ha estado espoleando desde Estós!. Inmediatamente me uno a el y celebramos la conclusión feliz de este viaje.
El merecido descanso de los guerreros!
Es todo por ahora, si os ha gustado podéis dejarme un comentario y me animaré a ir poniendo más cosillas por aquí.
Salut!
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